Trabajo en la agencia de viajes número uno de Latinoamérica, esa famosa .com que tiene publicidad por todos lados con la carita de Marley. Supongo que ya se dieron cuenta cuál es (¿desde cuándo soy tan misteriosa que no puedo decir el nombre?)

Ahí hice mi pasantía a través de la facultad (y a través de una compañera), es decir, fue mi primer trabajo serio y de mi profesión. Hace un largo tiempo ya, 3 años.

Ahí aprendí todo lo que sé de manejo de agencias de viajes. Ahí me dieron muchas oportunidades de crecer, de rotar de puesto, de aprender más. Ahí es de donde no me voy porque a pesar de todo, tengo muy buen sueldo para trabajar solamente 6 horas.

Ahí también es donde me siento un poco como en casa. Ahora paso 6 horas diarias, más algún que otro finde que me toca guardia. Antes, eran 9 horas todos los días. Así que pufff, imaginemoslo.

Me conocen todos, me aguantan con mis locuras y ocurrencias, me siguen en la pavada. Ahí es donde me río muchísimo, donde aprendí a trabajar en equipo, donde me siento cómoda porque si hay un lío lo arreglamos entre todos y si hay un problema le ponemos el pecho todos, y después nos reímos, obvio.

Como con Jesucito Montoya perdiendo su ticket, como con el bebecito de Copa que no podía viajar.

Mis compañeros son un gran grupo humano y hasta puedo decir que me llevo unos pares de amigos.

Ahí es donde también habiendo terminado mi pasantía, habiéndome desvinculado de la empresa hacía ya 5 meses, mi propia jefa de ese entonces me llamó para ofrecerme volver porque sabía que necesitaba mucho el trabajo, porque sabía la que estaba pasando. Nunca me voy a olvidar de eso, siento que tengo una deuda de por vida por haberse preocupado por mi en el peor momento de mi vida, por haberme dado la mejor "bien-vuelta" y por darme luego las herramientas necesarias para que yo pueda crecer.

En el pasillo de la alegría, yo soy la que habla cuando todos están en silencio y dice la huevada más grande del mundo para que se rían. Soy la que inventa cosas como "la semana de los regalos" y todos traemos regalos para los demás (obvio que cada uno sabe cuando trae regalos porque hicimos un calendario y lo pegamos en la pared), soy la insistente de los mates o la que saca temas ridículos a debatir.

Entonces me tienen como la chispa, la quilombera, la delirante. Soy el payaso digamos.

El viernes yo postié en facebook una cosa que escribí acá hace mucho, que se llama Un Saltito.

(Cuando me olvido quien soy, suelo leerlo.)

Lo puse sin fín alguno, y mucha gente comentó.

Vos misma lo decis... "SOLO POR SER COMO SOS LA GENTE TE QUIERE" . Sos la gordita mas linda de todos los mundos!!! Da... no tengo palabras para decir lo que me haces sentir todos los dias, no solo a mi! a todos los que te rodean... el otro dia, estaba hablando con una personita que me dijo " ... dani, dani, es una persona que te llena de alegria, uno aveces tiene dias malos y esta con cara de culo. Pero la ves a Dani, te dice una de sus ocurrencias y te roba una sonrisa, es increible pero te cambia el dia" . Me senti muy bien, mas aun, FELIZ de que compartas un poco de tus dias con conmigo!!!

Ese fue el comentario de mi supervisora. GUAU. Me quedé helada, se me hizo un nudo en el corazón de la alegría que me generó.

Hoy esa persona que dijo tan lindas palabras, me vio muy mal (realmente soy un trapo de piso en estos días).

Pasó, me dio un beso en la cabeza y me dejó un chocolate.

Me movió el corazón.

Ese gesto me hizo un click. Es una boludez, pero me hizo reaccionar y darme cuenta de que hay un montón de gente que me quiere que no tiene por qué aguantarme así. Que para algo vine al mundo y que es para decir pavadas y escuchar las risas ajenas. Que eso, dentro de todo, me sigue llenando el alma.

Así que quedense tranquilos mi muchachada del pasillo, que mañana vuelvo con todo. Ah! y llevo regalos!.