Estoy en huelga de hambre hasta que me de bola.
No puede ser!
No entiendo por qué no me quiere dar bola,
posta eh
no lo entiendo.
Cada cual tiene un trip en el bocho ... acá va el mío. Soy una persona común (o no tanto), contando su vida (o la construcción de la misma)...
[...] - El Mundo es eso -reveló- un montón de gente, un mar de fueguitos. Cada persona brilla con luz propia entre todas las demás. No hay dos fuegos iguales. Hay fuegos grandes y fuegos chicos y fuegos de todos los colores. Hay gente de fuego sereno, que ni se entera del viento, y gente de fuego loco que llena el aire de chispas. Algunos fuegos, fuegos bobos, no alumbran ni queman; pero otros arden la vida con tanta pasión que no se puede mirarlos sin parpadear, y quien se acerca, se enciende.
agosto 22, 2010
agosto 15, 2010
Ocurrencia dominical
Es increíble el poder que tengo:
Nunca pude aflojar mis propias cadenas, y sin embargo, muchas veces soy la que libero a mis amigos.
Paradojas de la vida misma.
Nunca pude aflojar mis propias cadenas, y sin embargo, muchas veces soy la que libero a mis amigos.
Paradojas de la vida misma.
agosto 10, 2010
No soporto el colectivo lleno ni me aguanto el smog. Me sofoca el tumulto de gente de un boliche y me ahogo estando encerrada.
Odio todos los programas de la tele, me molesta tener que usar ropa de moda y no entiendo cómo la gente no disfruta de quedarse en su casa leyendo un libro.
Me incomoda hablar de plata y me irrita la clasificación de personas de modo superficial.
Detesto seguir horarios: prefiero comer cuando tengo hambre y dormir cuando aparezca el sueño (que casi nunca pasa, pero esa es otra historia).
La rutina me afecta tanto como una mentira y preferiría no estar atada a nada.
¡Eureka!
Nací en el lugar equivocado, en el momento equivocado.
Odio todos los programas de la tele, me molesta tener que usar ropa de moda y no entiendo cómo la gente no disfruta de quedarse en su casa leyendo un libro.
Me incomoda hablar de plata y me irrita la clasificación de personas de modo superficial.
Detesto seguir horarios: prefiero comer cuando tengo hambre y dormir cuando aparezca el sueño (que casi nunca pasa, pero esa es otra historia).
La rutina me afecta tanto como una mentira y preferiría no estar atada a nada.
¡Eureka!
Nací en el lugar equivocado, en el momento equivocado.
agosto 08, 2010
Es tan difícil ser, cuando no sé quien soy.
Desconfiada, celosa, posesiva.
Fumo en cantidades espantosas.
Busco extremos, subo y bajo, es blanco o negro (no, matices no), y hasta que no veo la soga acariciándome el cuello, no reacciono.
Digo una cosa pero a la práctica llevo otra que nada tiene que ver con mis palabras sopladas.
Actúo por impulsos más de la mitad de las veces aunque la situación no lo requiera.
Tengo los dientes amarillos y las muelas careadas por una leve adicción a los masticables.
Camino chueca y desgarbada, y no me cuido la piel.
Guardo rencores y enojos, y soy poseedora de una lengua afilada para lastimar sin piedad a todo aquel que ose perturbar mi entorno.
Soy obsesiva, desordenada en mi propio orden, desprolija, descuidada.
Tengo el orgullo por el cielo y el autoestima por el suelo.
A veces no valoro las cosas como realmente quisiera y pierdo la paciencia en un abrir y cerrar de ojos.
Somatizo a tal punto que mi cuerpo sufre cien desperfectos y mi cabeza va a un ritmo desorbitante.
Intolerante, crítica, mandona, peleadora, insegura.
Lo asumo. Asumo todos esos adjetivos (des)calificativos y otros que me puedas adjudicar.
Pero no lloro. Me sorbo las lágrimas y me río.
Y lo mejor de todo esto
es que siempre me río, aunque sólo sea por fuera.
(y alcanza y sobra)
Fumo en cantidades espantosas.
Busco extremos, subo y bajo, es blanco o negro (no, matices no), y hasta que no veo la soga acariciándome el cuello, no reacciono.
Digo una cosa pero a la práctica llevo otra que nada tiene que ver con mis palabras sopladas.
Actúo por impulsos más de la mitad de las veces aunque la situación no lo requiera.
Tengo los dientes amarillos y las muelas careadas por una leve adicción a los masticables.
Camino chueca y desgarbada, y no me cuido la piel.
Guardo rencores y enojos, y soy poseedora de una lengua afilada para lastimar sin piedad a todo aquel que ose perturbar mi entorno.
Soy obsesiva, desordenada en mi propio orden, desprolija, descuidada.
Tengo el orgullo por el cielo y el autoestima por el suelo.
A veces no valoro las cosas como realmente quisiera y pierdo la paciencia en un abrir y cerrar de ojos.
Somatizo a tal punto que mi cuerpo sufre cien desperfectos y mi cabeza va a un ritmo desorbitante.
Intolerante, crítica, mandona, peleadora, insegura.
Lo asumo. Asumo todos esos adjetivos (des)calificativos y otros que me puedas adjudicar.
Pero no lloro. Me sorbo las lágrimas y me río.
Y lo mejor de todo esto
es que siempre me río, aunque sólo sea por fuera.
(y alcanza y sobra)
agosto 04, 2010
Chicos
No puede ser
la estoy remando en un océano de dulce de leche
con una hoja de palmera seca.
FORRO! ponete las pilas que no me dan los brazos solita!
la estoy remando en un océano de dulce de leche
con una hoja de palmera seca.
FORRO! ponete las pilas que no me dan los brazos solita!
Etiquetas:
historietas de amor,
Ocurrencias nanísticas
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E L L A
... Ella sufre en alguna parte. Siempre ha sufrido. Es muy alegre, adora el amarillo, su pájaro es un mirlo, su hora la noche, su puente el Pont des Arts ...